Cuando un cliente nos refiere que ha estado paseando por la playa, enseguida nos viene a la mente que el perro pueda presentar un anzuelo alojado en faringe, esófago o estómago y más motivo para actuar cuando nos dice que ha estirado del hilo que llevara colgando. 
En más de 30 actuaciones en los últimos meses ha sido necesaria la extracción de dicho anzuelo o aparejo de pesca, camuflado en pescado o en cebo de pesca y que el animal ha confundido con un aperitivo que llevarse a la boca.
El diagnóstico es sencillo cuando se ve el hilo o el dueño nos asegura que se ha tragado algo, por lo que la radiografía es necesaria para valorar el calibre del anzuelo y su localización. 
El porcentaje de animales que presentaban anzuelo podemos distribuirlo según su localización en:
| Faringe 20% | Esofago 35 % | Estómago 30% | Intestino 10 % | Recto 5% |
No hay predilección de raza, edad o sexo, siendo la mayoría de los casos atendidos de raza pastor alemán, boxer, labrador, cocker, caniche… razas a las que precisamente les gusta más en agua o a los que los propietarios les guste pasear en esos lugares. 
Raro es ver un chihuahua, un pekinés o un gran danés en el agua ( en otro blog hablaremos de la fobia al agua, situación que se da en el 10% de los caninos y en un 80 % de los felinos).
La extracción siempre la realizamos con anestesia, normalmente con propofol, siempre con intubación. 
La localización orofaringea es sencilla y rápida de solucionar; cuando es esofágica la endoscopia es la técnica más apropiada y la gástrica depende de la tensión del hilo que haya realizado el propietario y si se encuentra ya en antro pilórico o no.
Depende del tipo de apero de pesca ingerido y presente en el tracto digestivo se puede controlar radiológicamente su tránsito y lo pueda eliminar por las heces.
Raras veces ha sido necesaria la gastrotomía o la enterotomía para extraer los anzuelos, cuando con la endoscopia haya sido imposible realizar..
Campus Virtual del Hospital Veterinario J. Griñán
de casualidad he encontrado este post.
en estas vacaciones (agosto 2014) hemos ido a la veterinaria porque mi perrita se había tragado un anzuelo! se le había quedado a la altura del esófago. la pudieron extraer con endoscopia. tremendo susto nos dimos!