1- INTRODUCCIÓN. ¿Por qué hablamos de reptiles ?
Porque el 64% de los hogares españoles tiene mascotas y dentro del total, los reptiles representan el 4%, estando en progresivo aumento su demanda y posesión, sobre todo de los más exóticos y raros (existen más de 8100 especies de reptiles), lo que determina que cada vez el mercado y los clientes sean más exigentes en cuanto a la tenencia, mantenimiento y demanda de veterinarios clínicos que sean especialistas y sepan cada vez más de todo (especialistas de especie) y nos obligue a que no sólamante sepamos de su patología y medicina sino además de su manejo, biología, fisiología, requerimientos legales y reglamentos (CITES) y todo su mundillo que es tremendamente variable y extenso y del que hasta el 60% de las patologías en reptiles son debidos a mal manejo tanto en origen como por parte del propietario. La mayoría de animales vienen en fase terminal, siendo éste el primer punto a solucionar realizando por tanto una buena anamnesis viendo qué ocurre dentro del terrario y cómo tiene el propietario a su animal.
La distribución por grupos de mascotas asistidas en nuestras clínicas es:
–Tortugas: 50% (35% terrestres y 15% acuáticas)
–Saurios: 40% (20% iguanas, 10% camaleones, 10% otros saurios ( dragones, geckos….)
–Ofidios: 9.9 % serpientes ( sobre todo boas y pitones)
–Cocodrilos: 0.1%
Por tanto en esta exposición trataremos por lo menos de introducirnos en el mundo de los reptiles aunque sea de una forma muy concisa y práctica, insistiendo en las especies más representativas.
HERPETOLOGÍA: Estudio de los reptiles. Por tanto los especialistas clínicos nos consideraremos veterinarios herpetólogos. Del griego HERPETON: Reptil: animal que repta o arrastra. La característica fundamental de los reptiles es que son animales poiquilotermos ectotermos: es decir de temperatura corporal variable y dependiente de fuentes de calor externas (erróneamente llamados -de sangre fría-)
Antes de citar las especies más frecuentes, es importante hacer un breve incapié en que lo más importante antes de poseer o adquirir un reptil, es saber cuál aconsejar tener y saber diseñar el mejor terrario para él, para poder así evitar patologías en la medida de lo posible.
De cara a la elección, además del precio se debe de tener conocimiento sobre las exigencias en cuanto a temperatura, espacio, tamaño que alcanzará de adulto, agresividad, tipo de desechos, presentación del animal en el momento de la adquisición: color ( los enfermos tiene un color apagado), los ojos sean brillantes y limpios (no llorosos, cerrados ni hundidos), saber si come antes de comprarlo, ver la cola y las patas por si presentara deficiencias minerales. También hay que saber qué es lo que se busca, porque no es lo mismo comprar una iguana que de pequeña muy bonita, pero de adulta se llega hasta los 2 metros y 8 kg y no es lo mismo una serpiente que necesita disponer de un ratón semanal, por lo que hay que disponer de ellos, incluso criarlos, pueden vivir más de 30 años, depositan un montón de desechos y hay tortugas que muerden, otras que son muy sucias y requieren filtros de agua, mayor limpieza y un largo etcétera de situaciones que uno debe de saber previamente, ya que cada especie tiene unas necesidades y unas características muy diferentes.
2. TERRARIO
El mal manejo de uno o varios de estos factores determinará si un reptil adquirido se adapta mejor o no, por lo tanto hemos de saber en qué consisten:
-TEMPERATURA: es el principal factor a controlar ya que de ella dependen todas las funciones vitales del animal como la inmunidad, cicatrización, respuesta a los fármacos, actividad motora y neurológica, reproducción, alimentación, capacidad de alimentación, digestión y la actividad enzimática (por ejemplo a 28ºc 5días y a 18ºc 15días tardaría una serpiente en digerir un conejo.
Si fuera baja se aletargaría y se haría lenta o se paralizarían todas las funciones como la de digestión y la absorción de nutrientes, produciendo deficiencias o fermentaciones digestivas, además de predisponer a inmunosupresión, aumentando la sensibilidad a infecciones y patologías de todo tipo, ya que carecen de sistema de termoregulación.
Se debe de buscar siempre la temperatura corporal óptima TCO siempre dentro del rango de gradiente óptimo (zona óptima preferida TOP), teniendo dentro del terrario puntos calientes y puntos fríos y sea el animal el que se coloque donde quiera en cada momento.
Debe de evitarse la hipotermia y el golpe de calor ( no superar la temperatura crítica mínima o máxima) ya que son muy sensibles al mínimo cambio que sobrepase esos puntos críticos, sobre todo, los tropicales o no autóctonos.
Cada especie tiene su propia TCO que deberemos de saber y cómo ajustarla, además de saber cuales deben hibernar y cuales no. La TCO normalmente suele ser de 26-29ªC y la TOP de 22 a 32ªC, según especie y algo menos por la noche (20-24ºC), todo ello según el estado nutricional y sanitario del animal; animales enfermos suelen requerir un incremento respecto al basal.
Disponemos de calefactores varios como piedras, focos, placas de loza,cables o mantas calefactoras siempre evitando que se quemen, poniéndolas a distancia, cubriéndolas además de termostatos para regular.
Los focos (también lámparas incandescentes, entre 25-60W para un volumen de 30 litros) se colocan en la parte alta sobre todo para calentar la zona de ramas ( en especies arborícolas) y en general los calefactores sólo deben de abarcan la mitad o ¾ de la superficie para poder tener también puntos fríos, no es aconsejable que sea uniforme la temperatura, se estresarían. Es bueno tener un termómetro en cada zona.
Las mantas son buenas para cuarentenas, pero no para acuaterrarios.
También puede servir la calefacción del hogar (22-25ºC).
Comentar que una tortuga sana en hibernación debe perder menos de un 5-6% de su peso original y por tanto a un animal débil no debe permitírselo porque se predispone a despertar enferma.
-LUZ: influye sobre el apetito, síntesis de vitamina D3 (uvB 280-315 nm) y la absorción del calcio sobre todo en saurios y la uvA (320-400nm) que influye sobre el comportamiento.
El fotoperíodo mínimo desde 9 horas, excepto las especies nocturnas, hasta las 12-14h luz y
10-12 oscuridad, en verano, al contrario en invierno y 8-9h en primavera/otoño.
Mediante lámparas de neón, fluorescentes o bien mejor, solar directa, pero la fluorescente convencional no es suficiente en espectro y uvB, las más similares a la solar son las de -true lite- pero son caras y hay que renovarlas cada 9-12 meses para garantizar su efectividad. Se deben de colocar a 30-60 cm de altura del animal.
-HUMEDAD: Influye sobre el apetito y la muda. Aunque cada especie tiene la suya propia, la mayoría como son tropicales suelen tener entre 65-90%. Se consigue mediante humidificadores o con los mismos recipientes de bebida, ya que con el mismo calor del terrario y a más superficie del recipiente, más agua evapora. También se consigue regulando el tamaño de las tomas de ventilación.
Todos deben de tener agua ad-libitum, incluso pequeños recipientes o bañeras, debiendo saber que los camaleones sólo beben del agua de rocío de las hojas o sobre su piel ya que no se desplazan a los bebederos, por lo que es conveniente rociar a diario hasta 2-3veces.
-VENTILACIÓN: mediante rejilla o extractores para evitar sobre-humedades y fermentaciones.
-TERRARIO en sí. De materiales diversos y cada uno se lo puede diseñar a su gusto, bien de metacrilato, cristal, madera, aluminio…..(los acrílicos tienen mejor transmitancia de la luz solar que los de cristal) evitándose la monotonía y el estrés enriqueciendo el ambiente ( la decoración es importante, ramas, abrasivos para favorecer la muda, refugios, cascadas, arroyos, espejos, muñecos ( para evitar la agresividad y la automutilación…), insectos u objetos que se muevan para evitar aburrimiento, las serpientes gustan en grupo ( no solas ni hacinadas) y a las iguanas les gusta contacto táctil por la noche, estímulos auditivos, evitar fugas, quemaduras, además higiene y limpieza. En todo terrario se debe recrear lo más fiel a su ambiente natural para así obtener una mayor capacidad de adaptación.
El terrario puede ser acuático, terrestre, mixto, desértico… Los tamaños pueden oscilar según sea de interior o de exterior, siendo estos entre 50*30*30 para especies pequeñas hasta mayores de 1 o 2 m2 para las grandes, de anchura mayor que la mitad de la longitud, más altos que ancho o al revés,etc….habiendo reglamentos para ello.